viernes, 2 de julio de 2010

G. Perelman renuncia a un premio de un millón de dólares.

El matemático ruso Grigori Perelman , nacido en 1966, ha rechazado el premio de un millón de dólares concedido por resolver la Conjetura de Poincaré, uno de los siete mayores enigmas matemáticos propuestos por el Instituto de Matemáticas Clay (CMI) al inicio del siglo XXI, conocidos como Problemas del Milenio. Es el primer de los Problemas del Milenio resuelto.

Gregory Perelman no acudió al congreso celebrado en París el 8 y 9 de junio en que se iba a reconocer ante cientos de matemáticos de todo el mundo, la resolución de la Conjetura enunciada por Henri Poincaré (1854-1912), hace ya más de un siglo, por la que se le dio el premio, el pasado 19 de marzo.
El Instituto Clay señaló que el próximo otoño decidirá el destino del dinero del premio "en beneficio de las matemáticas".

El matemático tiene 44 años y vive en la actualidad con su madre en un pequeño apartamento en un barrio periférico de San Petersburgo. A finales de 2005, Perelman abandonó el Instituto de Matemáticas Steklov en el que trabajó y desde entonces se gana la vida dando clases particulares, según los medios de comunicación rusos. Perelman desea continuar viviendo en el anonimato alejado de la sociedad matemática.

En 2006 le fue concedida la Medalla Fields (considerada el Nobel de Matemáticas), en el Congreso Internacional de Matemáticos, celebrado en Madrid , en reconocimiento por haber encontrado la solución de la Conjetura de Poincaré, y no acudió a recogerla.

Esta medalla zanjó la polémica sobre quién había resuelto primero la Conjetura pues, Perelman publicó en 2002, en Internet el primero de tres artículos en los que afirmaba haber demostrado la conjetura de geometrización de William Thurston, del que la Conjetura de Poincaré es sólo un caso particular, lo hizo en la página www. arxiv.org, en el que los matemáticos ponen a disposición de la comunidad sus trabajos antes de que estos se publiquen.
Este artículo, de casi 100 páginas, omitía muchos de los detalles intermedios de la prueba . Mientras se estaba verificando la demostración dos matemáticos chinos trataron de apropiarse de su trabajo, dando a entender que el único mérito del ruso había sido sugerir una estrategia para resolver la conjetura.

"La solución de la Conjetura de Poincaré fue una gran sorpresa, nadie esperaba tan pronto que que fuese resueltal", recordó el director del Instituto Clay , James Carlson.